La sunamita, Inés Arredondo
Inés Arredondo escribió un cuento transgresor y sutil. La sunamita cuenta una historia perturbadora con un lenguaje sencillo, una prosa que cabalga con detalles importantes en cada línea y personajes entrañables.
El lío central del cuento hiere a la protagonista con un dolor que solamente el silencio impuesto puede provocar. Esa indiferencia pública ante lo grave que vuelve culpables a todos.
Un abuso atroz que hace preguntarte, aunque seas una persona íntegra, si alguna vez tu no-acción, tu no reclamar, afectó a alguien. De manera indirecta.
Porque una cosa es actuar conforme a tu moral y tus principios, y otra muy distinta es reaccionar por impulso a lo que es considerado costumbre, pero que detrás guarda un pasado oscuro y genera víctimas.
Y es que no hay salida. ¿Con quién te quejas, si esa autoridad juzga?
En cambio, el agresor recibe una palmada en la espalda, un "no te preocupes en masa" que no hará más que sembrar una semilla que germinará con más violencia.
Y nuevas victimas.
Pasen a saludar y a maravillarse con Inés Arredondo, convertida ya en una escritora clásica de la literatura en México.
Su cuento La sunamita se adelantó a su época y predijo con un grito desesperado, de voz entrelazada con prosa, una queja que se multiplicó décadas después.
Inés Arredondo nació en Culiacán, Sinaloa, el 20 de marzo de 1928. Fue integrante del grupo de escritores conocido como Generación del Medio Siglo, grupo de la Casa del Lago o grupo de la Revista Mexicana de Literatura. En 1979 ganó el premio Xavier Villaurrutia por Río subterráneo. Obtuvo la Medalla de Honor "Bernardo de Balbuena" en 1986 y el Doctorado honoris causa de la Universidad Autónoma de Sinaloa en 1988. Falleció en la Ciudad de México el 2 de noviembre de 1989.